La impresión 3d, la industria textil y el mundo de la joyería
Para efectos de este artículo, utilizaremos el término «moda textil» para hacer referencia a la moda que incluye el diseño y elaboración de prendas de vestir, joyería, bisutería, calzado y accesorios y, los procesos que van desde la transformación de la materia prima natural hasta el acabado final de la pieza, resaltando las bondades de la impresión 3D en la moda textil.
La industria de la moda textil mueve miles de miles de millones de dólares en todo el mundo y engloba la creatividad, la innovación y la capacidad de diseñar con un estilo único que le permita diferenciarse en la producción de vestimentas básicas y lencerías o de piezas más caras y exclusivas para el mercado del lujo.
La impresión 3D ha penetrado de manera importante en las diferentes industrias de producción de bienes y la industria de la moda textil no escapa de esta realidad. Hoy en día, en el diseño y elaboración de prendas de vestir, complementos, accesorios y calzados se utilizan las tecnologías 3D en casi todos los procesos.
La tecnología 3D en la industria de la moda textil se utiliza durante el proceso creativo, permite elaborar prototipos para posteriormente crear piezas exclusivas o la producción bajo demanda. La industria de la moda textil es altamente competitiva por lo que desarrollar piezas novedosas y atractivas es fundamental y, hoy por hoy, se puede lograr a través del uso de la impresión 3D.
¿Te imaginas que puedas comprar una pieza que encaje perfectamente con la silueta de tu cuerpo? ¿Te ves imprimiendo tu propia ropa o zapatos unas horas antes de estrenarlos? Bueno, en el futuro eso va a ser así, y a través del escáner 3D podrás obtener una imagen de tu cuerpo o de tu pie y crear una pieza de vestir exclusiva para ti.
La impresión 3D en la moda textil revoluciona el mundo de las pasarelas
Las tecnologías de impresión 3D ha cautivado la atención de reconocidos diseñadores, quienes han presentado su colección en distintas pasarelas, como es el caso de la diseñadora holandesa Iris Van Herpen, en un trabajo junto con el arquitecto Francis Bitonti, quienes, en el desfile de moda “Crystallization”, presentaron por primera vez en el año 2011, una colección totalmente elaborada con impresión 3D.
A partir de ese momento, Herpen presenta prendas de vestir elaboradas con impresora 3D SLS, manteniendo a lo largo de los años el uso de este recurso tecnológico en sus distintas colecciones, con lo que ha creado una sólida reputación en el campo de la moda textil a través de impresión 3D.
En el año 2015, en Nueva York se creó la primera pasarela de la moda textil creada por impresión 3D (3D Print Fashion Show), donde participaron algunos diseñadores, entre ellos:
- Melinda Looi, quien mostró un vestido de coctel impreso en una sola pieza, lo suficientemente flexible.
- Andrew O´Mara, un diseñador de calzado en 3D para la startup Feetz, que es una compañía que convierte fotos de los pies de los clientes en zapatos impresos en 3D personalizados.
- Rachel Nhan: quien elabora collares en impresión 3D.
- Francis Bitonti: que es el director de un estudio que produce joyas, vestidos, bolsos y accesorios impresos en 3D.
De igual manera, la diseñadora Danit Peleg, logro crear vestidos, tops, camisetas y faldas para su colección con la impresión 3D, a través de un sistema de mallas y materiales elásticos para superar la inflexibilidad de las piezas.
Por su parte, la diseñadora Alejandra Mora-Sánchez, logro desarrollar un vestido negro, de corte recto, talla única, que puede utilizarse de manera cotidiana, está compuesto por hexágonos de Filamento TPU que se adaptan perfectamente a la figura de la mujer, lo que la ha hecho acreedora del premio al “Diseño de Concepto”, otorgado por Red Dot Award.
Aplicación de la impresión 3D en la industria de la moda textil
Hoy por hoy, la impresión 3D tanto para el diseño como para la confección de prendas de vestir está jugando un papel importante. Muchos diseñadores de alta costura están utilizando las bondades de esta tecnología para la creación de piezas con extraordinaria belleza, funcionalidad y por supuesto que resalten la estética.
La impresión 3D permite a los diseñadores crear modelos arriesgados, futuristas, modernos, con los que pueden impactar en el mundo de las pasarelas. Por ahora las prendas de vestir se realizan en su gran mayoría con fines artísticos, pero en un futuro no muy lejano se podrá imprimir piezas cómodas y para uso cotidiano.
Otra de las ventajas de la impresión 3D en la industria de la moda textil, es su capacidad para elaborar formas complejas sin molde, que no pudiesen elaborarse con los procesos convencionales de la industria de moda textil. La producción exclusiva y personalizada, es una de las aplicaciones de la impresión 3D en la moda textil.
El uso de tecnologías de impresión 3D de filamentos y resina, permite la realización de piezas u accesorios con muchos detalles y gran complejidad, generando prendas con gran belleza, muy llamativas, que generan gran impacto visual. Hoy en día se están utilizando materiales más flexibles, que aportan mayor ligereza a la pieza para adaptarse al cuerpo humano y permitir los movimientos naturales. Se está realizando investigaciones con el fin de crear tejidos sostenibles a partir de la impresión por deposición fundida (FDM).
El material más utilizado para la creación de piezas para la moda textil y sus accesorios es el FilaFlex, creado con elastómeros termoplástico (TPE), muy elástico, no tóxicos y resistentes que permiten una impresión de alta calidad, puede ser combinado con otros materiales y tiene un precio accesible.
Otras aplicaciones de la impresión 3D en la moda textil
1. Impresión de calzado 3D: Existen empresas reconocidas de calzados deportivos que han iniciado la fabricación de modelos impresos en 3D, aunque, la producción a demanda aún tiene sus restricciones y solo se limita a unos pocos clientes. Otras empresas apuestan por la creación de zapatos casuales y prometen adaptarlos al consumidor. En el área del diseño, algunos creativos han realizado diseños atrevidos e impactantes visualmente y han alcanzado las pasarelas de la mano de empresas de calzados de renombre.
Algunos fabricantes de zapatos deportivos, entre ellos: Adidas, New Balance Reebok, Nike, están utilizando la impresión 3D con el objetivo de tener la posibilidad de la personalización del calzado y de esa manera permitir atender las necesidades individuales de sus clientes. Por el momento, no se ha logrado la impresión de un calzado 3D en su totalidad, debido a las limitaciones en la disponibilidad de materiales de impresión con textura similar a la piel, solo se está utilizando para la impresión de suelas, cuñas, tacones y accesorios.
2. Joyería: En esta área de la moda textil es donde se ha visto un mayor impacto de la impresión 3D, ofreciendo grandes aportes como la reducción de costos, oportunidad de producción de las piezas en pequeños talleres, uso de moldes elaborados con esta tecnología, capacidad de personalización, adaptación de la pieza a la anatomía del cliente a través de uso de un escáner 3D.
La impresión 3D influye positivamente tanto en el diseño como en la elaboración de piezas exclusivas o de consumo masivo, se pueden fabricar piezas con materiales de plástico o en metales preciosos como el oro y la plata, utilizando moldes impresos en 3D.
3.- Impresión 3D accesorios: ya hay varias firmas que han impreso en 3D modelos muy llamativos, exclusivos, aunque no es la tendencia, ya que la poca disponibilidad de materiales los hace muy costosos en comparación con los bolsos y accesorios fabricados de manera tradicional.
Ventajas de la fabricación 3D sobre la fabricación textil tradicional
La tecnología 3D, permite al diseñador de moda textil desarrollar su creatividad en pleno, puede realizar pruebas, verificar el resultado final de su creación, corregir errores o rediseñar si no le convence el resultado final, eliminando el desperdicio que generaría con el uso de la confección tradicional.
La impresión 3D en la moda, libera del uso intensivo de los suelos ya que no se requieren de monocultivos o cultivos extensos de algodón, que es el material más utilizado en la industria textil tradicional.
La impresión 3D cuida el medio ambiente, con esta tecnología se eliminaría el uso excesivo de pesticidas necesarios para el cultivo del algodón y se reduciría el consumo de agua, estimada entre 7000 y 10000 litros de agua para producir un kilo de algodón.
La impresión 3D en la moda permite la reducción en el uso de energía, que es excesivo en la industria textil convencional debido a la transformación de materiales para la fabricación de las prendas de vestir. Estudios indicas que el 10% de las emisiones de CO2 provienen de la industria textil.
Reducción de residuos: las prendas fabricadas a través de impresión 3D no generan desperdicios, ya que solo se utilizaría el material necesario para imprimir el trozo de tejido requerido. De igual manera en muchos países, la fabricación textil en masa conlleva a la eliminación de una gran cantidad de prendas de vestir que no se han logrado distribuir entre los consumidores.
Las prendas pueden ser confeccionadas en cualquier lugar del mundo y elaboradas en el sitio donde se van a consumir, disminuyendo los efectos del transporte sobre el medio ambiente y la fabricación sería de manera flexible, es decir las prendas elaboradas se ajustan a la cantidad de prendas requeridas por los clientes.
¿Por qué la impresión 3D no es el futuro inmediato para el consumo textil masivo?
Los diseñadores están conscientes de que la impresión 3D, en este momento, no va a sustituir los métodos de fabricación tradicional en la moda textil, ni puede ser utilizada para la producción en masa, pero les permite a ellos desarrollar su potencial creativo, mientras se avanzan en las investigaciones para lograr materiales más manejables.
La poca disponibilidad de materiales para la fabricación de la ropa es una gran desventaja para la impresión 3D en la moda frente a la tecnología de confección convencional, que dispone de una gran variedad de telas u otros materiales para la elaboración de las prendas de vestir.
Otra desventaja, son las máquinas de impresión disponibles en el mercado, que tienen poca capacidad y rapidez de impresión. Hoy imprimir una pieza de tejido con impresora 3D, requiere de un tiempo mayor al que requeriría una tejedora industrial. Muchas impresoras no tienen la capacidad para imprimir piezas de gran tamaño, por lo que la confección de la pieza final requiere de un minucioso proceso de ensamblaje.
Los diseños elaborados en 3D, no pueden competir con las ventajas creativas y las texturas de los materiales ofrecidos por la industria textil tradicional, ella dispone de encajes, piel, rasos, algodones, tules y otros, mientras que la tecnología 3D solo dispone de termoplásticos.
Para lograr dar un salto en el campo de la moda, la impresión 3D debería tener la capacidad de imprimir texturas semejantes a las que hoy en día se disponen en la industria textil convencional.[
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